El módulo de aterrizaje InSight de la NASA ha estado descansando de manera segura en Marte durante casi un año y está haciendoun trabajo realmente genial.La mayor parte del conjunto de instrumentos sensibles del robot ha estado funcionando según lo previsto, enviando datos y grabaciones de la actividad sísmica en el polvoriento planeta.Sin embargo, una de las herramientas, llamada "topo", no cumplió con las expectativas.

Se supone que el instrumento se clava en la superficie, empujándose a una profundidad de hasta 16 pies para recopilar lecturas de temperatura.Desafortunadamente, la sonda no ha logrado sumergirse a más de un pie de profundidad, peroLa NASA cree saber por qué.

El topo que se automartilla depende de la fricción del suelo circundante para impulsarse, pero ahora se cree que el suelo simplemente está demasiado suelto para que la sonda pueda agarrarlo.Afortunadamente, el módulo de aterrizaje InSight está equipado con un brazo que puede ayudar.

Utilizando el largo brazo metálico de InSight, el equipo científico “fijará” el topo contra el costado de su agujero, aumentando la fricción del material circundante y, con suerte, dándole a la sonda la oportunidad de cumplir su destino.

Esta operación ha tardado mucho en llegar y el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA ha tenido que prepararse para la oportunidad quitando una cubierta que rodeaba al topo y colocando el brazo en posición.Esto se hace más difícil por el hecho de que hay un retraso significativo en la comunicación entre la Tierra y Marte, y el equipo tiene que esperar a ver que se ejecuten sus comandos antes de saber cómo proceder.

Vale la pena señalar que el brazo robótico del módulo de aterrizaje nunca fue diseñado para hacer esto.No se puede controlar en tiempo real, por lo que sus manejadores pueden ordenarle al brazo que empuje durante unos momentos y luego se detenga como lo harían si la sonda estuviera aquí en la Tierra.En cambio, tienen que decirle al robot dónde colocar el brazo (en este caso, justo contra el suelo junto al topo) y esperar contra toda esperanza que el ejercicio funcione.

Independientemente de cómo se desarrolle esto, no tendremos que esperar mucho para descubrir el destino del topo, pero cruzaremos los dedos.

Fuente de la imagen: NASA/JPL-Caltech